COMO UN BESO EN EL DESTIERRO

COMO UN BESO EN EL DESTIERRO

A Miguel Hernández.

 

Rugiré por ti un trueno,

un enlutado toro por tu muerte

un rayo enardecido por el cosmos

repitiendo tus versos

esparcidos en estrellas fulgentes,

eternas, como un beso en el destierro.

Nada ha cambiado desde que te fuiste,

nadie ha partido hacia los olvidos,

la yunta de tu niño viejo

sigue preñando la tierra de vida,

abriéndola al futuro.

Caminaré contigo la distancia

desde Chiclayo, hasta la Orihuela

que te nombra con aires de tonada

y retoña contigo en primavera

Y nada de lo que me diga el viento

será más que un susurro eternizado

en tu voz de poeta,

en la cruz de tus huesos

revividos esta noche secreta

más allá de la muerte y el silencio.

8.6.0