mi navidad en el exilio
mi navidad en el exilio
es una rosa de los vientos,
violines de papel, pañuelos,el destino
cruzándose conmigo, vistiéndome de invierno,
viajando en una estrella de otro cielo.
Bebo a sorbos las calles de este tiempo
con mi paquete roto de guirnaldas
y mi luna cual tornasol espejo;
regalo de unos reyes
despojados, mendigos de sí mismos,
tristísimos, viajando en el silencio.
Mi Navidad en el Mediterráneo
azul y azul, donde me vine a recalar
estos pasos hundidos en la nada,
es una copa húmeda de cielo;
estrellitas de arenas en mis manos,
abalorios de luces y recuerdos
llegándome de lejos.
Un pesebre durmiendo en otra historia
naciendo en esta noche de Diciembre,
el cuento sin final que me cantaba
mamá, desde su voz que dulce viene
trayéndome el ayer en su palabra.
Mi Navidad en la distancia
es la misma, pero ya no me invita
a besarle las manos escarchadas
porque no tengo cantos que ofrecerle
a esta rosa vencida por los vientos
a estas calles ajenas del invierno,
a este mar, a este cielo de otro cielo.